Knass sostiene que el aumento del dólar era esperable y aún considera que se encuentra en niveles bajos en comparación con el valor del año pasado. Según sus estimaciones, el dólar debería ubicarse en alrededor de $740 o $750 para alcanzar un equilibrio.

A pesar de que el dólar superó la barrera de los $500, Knass considera que todavía tiene margen para aumentar en relación a la incertidumbre económica actual. Explica que las empresas necesitan dólares para adquirir insumos y, si el valor de la divisa aumenta, esto se traduce en un incremento en los precios de los productos.

El economista también destaca el problema del bimonetarismo, una situación particular de Argentina donde las personas tienen una fuerte tendencia a comprar dólares. Knass señala que esta actitud no es común en otros países y contribuye a la inestabilidad económica.

Además, el entrevistado desmiente la creencia de que el aumento del dólar beneficia únicamente a quienes compraron a un valor más bajo para luego vender a un precio más alto. En su opinión, la incertidumbre y la inestabilidad perjudican a todos, especialmente a los trabajadores que tienen dificultades para cubrir sus necesidades básicas. Los empresarios, por su parte, se ven obligados a aumentar los precios para protegerse.