BUENOS AIRES Y POSADAS (Especial). Un centenar de trabajadores fueron despedidos en las últimas horas de la obra social PAMI, en medio de la emergencia nacional por el avance del coronavirus en el país.

La insensible medida fue dispuesta por la conducción del organismo que conduce Luana Volnovich y despertó el enojo de trabajadores y afiliados.

El número de posibles despidos podrían incrementarse en una entidad de labor clave en el cuidado de los adultos mayores, el más vulnerable de los grupos de riesgo de contagio y fallecimiento por COVID-19.

Este accionar va en contramano del llamado realizado en las últimas horas por el propio presidente Alberto Fernández, y sus ministros de Desarrollo Productivo y Economía, que instó a cuidar el empleo en medio de la crisis.

Los trabajadores del instituto se declararon en “estado de alerta” y no descartan la convocatoria a medidas de fuerza.

En ese marco, la Unión de Trabajadores del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (UTI) instó a las autoridades del PAMI a abrir una instancia de diálogo para encontrar una solución al conflicto.

En las listas de negras que decretó el kirchnerismo duro de la nueva administración de la obra social de los jubilados figuran al menos tres jefes de secciones de la delegación Posadas, que asumieron durante la gestión del odontólogo Rolando Rubleski.

Se trataría de los responsables del área de Recursos Humanos, Coordinación de la Àrea Social y una trabajadora de carrera que asumió la oficina del Pami Escucha. En Misiones, por lo que se sabe, todavía no habrían llegado las cartas documentos con los despidos dispuestos por la ultra k, Volnovich, la ex diputada que a poco de asumir nombró como gerente de ese instituto a su hermano Guido.

FSV.