“Venimos en lucha desde hace tiempo”, afirmó, destacando la persistencia del personal del hospital en la búsqueda de mejores condiciones laborales y salariales. Explicó que se estuvieron reuniendo en el hospital para discutir y decidir qué medidas tomar para llamar la atención sobre los retrasos en los pagos de sus salarios.
Domínguez también señaló las disparidades salariales dentro del hospital, mencionando que muchos empleados ganaban entre 350 mil y 550 mil pesos por mes, pero que incluso con los aumentos recientes, estos salarios no son suficientes para cubrir sus necesidades básicas. Hizo hincapié en que la realidad económica en Misiones es diferente a la de otras regiones, con costos de vida más altos, incluyendo pasajes, energía y alimentos y desiestimó las comparaciones con la Canasta Básica Alimentaria de Buenos Aires.
“Antes llegábamos a fin de mes y ahora una semana antes no tenemos más plata”, lamentó, destacando el impacto financiero que la situación está teniendo en las familias del personal del hospital. Reveló que él mismo tiene dos trabajos y que su esposa también trabaja, pero aún así enfrentan dificultades para llegar a fin de mes, especialmente con dos hijas en la universidad.