“Es una situación similar a la del año pasado. Todavía no se han abonado los salarios correspondientes a mayo y junio”, lamentó, resaltando la recurrencia de este problema que afecta gravemente a los trabajadores de la salud.

Las faltas de pagos generaron dificultades económicas significativas para estos trabajadores. Kinder explicó: “Siempre se cobra como máximo el 10 o 15. Algunas obras sociales como Camioneros nos dicen que esperemos hasta el 30 de septiembre”.

La situación se agrava por las disputas de responsabilidad entre entidades. “La superintendencia dice que Anses retiene los fondos y los deposita directamente en las cuentas de cada obra social”, señaló, agregando que esta situación parece ser parte de un ajuste más amplio.

Kinder también expresó su preocupación por el crecimiento del trabajo informal en el país, lo que hace que muchas personas estén en una situación financiera precaria. “Se quedan sin dinero y se va a hacer difícil cubrir”, advirtió.

La falta de ajustes salariales adecuados también ha impactado en los prestadores. “Habíamos tenido un aumento del 40% antes de las PASO, no tuvimos una reevaluación de nuestro salario post PASO y hubo una devaluación terrible del 20%”, explicó.

Uno de los aspectos más preocupantes de esta situación es el impacto en las personas con discapacidad que dependen de estos servicios. “Obra social que, aprobada 12 sesiones mensuales, va a aprobar 6; algunas obras sociales no van a cubrir la quinta semana del mes, es un recorte total una ‘voucherización’ de las prestaciones de discapacidad”, denunció.

La situación es grave, y Kinder concluyó con una reflexión sobre las consecuencias humanas de esta crisis: “Podemos ponernos ‘cara de perro’, pero la persona con discapacidad no va a recibir su tratamiento”.