“La problemática viene desde hace más de 20 años y se agudizó en los últimos meses”, afirmó Melgarejo, destacando la larga historia de dificultades relacionadas con el suministro de agua en la ciudad. La falta de agua llevó a que la comunidad se una en una marcha para demandar una solución inmediata.

El vecino explicó que la movilización incluyó una visita a la municipalidad, donde tuvieron la oportunidad de dialogar con el intendente Edgardo Aquino, quien se comprometió a gestionar y encontrar soluciones a la problemática del agua. Sin embargo, al llegar a la Cooperativa de Agua Potable de Bernardo de Irigoyen (COOPABIL), se encontraron con la falta de personal para recibir sus reclamos.

“Necesitamos una solución inmediata. Ahora venimos a la COOPABIL donde está todo cerrado y no hay nadie que nos reciba”, expresó Melgarejo, subrayando la urgencia de la situación. Los residentes solicitan una asamblea extraordinaria para discutir y abordar los problemas relacionados con el suministro de agua.

Melgarejo describió la grave situación que enfrentan algunos barrios, donde el suministro de agua se reduce a una vez a la semana, y en algunos casos, hay comunidades que han pasado 15 días sin acceso al vital líquido. Esta escasez llevó a los residentes a incurrir en gastos adicionales al comprar agua de camiones a precios elevados.

“Solamente queremos tener agua en nuestras casas”, afirmó Melgarejo, destacando la simplicidad de su solicitud. La comunidad, que lleva desde las 8 de la mañana buscando respuestas, exige saber por qué no cuentan con un suministro adecuado de agua y aguarda una respuesta inmediata de las autoridades pertinentes.