APÓSTOLES. En una entrevista en el programa “Otro Día Más” de Radio Social Club, el padre Andrés Rojas, párroco de Colonia Liebig, desveló detalles sobre su vida y pasiones. Con una personalidad única que une su compromiso con la fe y un inusual hobby, el padre Rojas ha conquistado el interés y la admiración de la comunidad local.

Nacido en Gobernador Virasoro, Corrientes, el padre Rojas encontró su vocación religiosa temprano en la vida. Realizó su seminario en Resistencia, Chaco, y se ordenó como sacerdote a la edad de 25 o 26 años, celebrando este año su vigésimo aniversario de sacerdocio.

En un sorprendente giro, el padre Rojas reveló que parte de su familia no tiene raíces católicas y que creció en un ambiente donde convivían evangélicos y católicos sin divisiones. Esta experiencia única le permitió tener una visión abierta y comprensiva de la diversidad religiosa.

Además de su dedicación pastoral, el padre Rojas tiene un fascinante hobby: la producción artesanal de cerveza. Durante su estadía en Ituzaingó como sacerdote, aceptó un desafío con un amigo para elaborar su propia cerveza. Este desafío se convirtió en una pasión y un camino para descubrir un mundo de sabores y conocimientos.

Con una modesta olla de 60 litros y un enfoque casero, el padre Rojas se aventura en el arte de hacer cerveza. A lo largo de los años, ha establecido una red de contactos que le proporcionan ideas y consejos sobre cómo mejorar su técnica. En lugar de comprar todos los elementos en línea, ahora puede encontrar los insumos necesarios en Posadas, lo que demuestra el crecimiento de la comunidad cervecera en la región.

El padre Rojas explicó que la cerveza se puede personalizar según los gustos y preferencias de cada persona. Utilizando semillas de cebada y agregando caramelo en diferentes proporciones, se pueden obtener cervezas más suaves o más fuertes. Además, existen recetas preestablecidas y kits, pero el padre Rojas disfruta de la experiencia de crear su propia mezcla.

El proceso de elaboración de la cerveza involucra macerar las semillas en agua caliente durante dos horas, luego colar y hervir el líquido resultante durante una hora. El padre Rojas también mencionó la importancia del lúpulo, que puede agregar un sabor suave o fuerte según se utilice en forma de flor o extracto.

Entre las variedades que elabora, destaca la cerveza negra con café y un toque de avena, conocida como “stout”. Después de enfriar el líquido, se asegura de que todo lo que entre en contacto con la cerveza esté esterilizado. Luego, se agrega levadura de cerveza y se inicia el proceso de fermentación, utilizando un sistema que permite la salida del gas mientras la levadura actúa.

Después de embotellar la cerveza, se gasifica con un poco de azúcar y se deja fermentar durante 8 días a temperatura ambiente, seguido de 10 días de estacionamiento. Después de este tiempo, la cerveza artesanal del padre Rojas está lista para ser disfrutada por aquellos que tienen el privilegio de probarla.

A pesar de su pasión por la cerveza artesanal, el padre Rojas mantiene su dedicación a su comunidad parroquial. Este sábado, dirigirá la celebración del Corpus Christi en Liebig, que incluirá una misa y una procesión. Sin embargo, también destacó que el domingo tendrán elecciones en la zona, recordando la importancia de la participación ciudadana.