El 24 de julio se celebra el Día Mundial del Autocuidado, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) define como la capacidad de las personas, familias y comunidades para cuidar su propia salud, prevenir y afrontar enfermedades o discapacidades con o sin la ayuda de un profesional de la salud.
Desde la pandemia, la adopción de medidas preventivas de autocuidado como la alimentación saludable y la actividad física, y el uso de productos de autocuidado como medicamentos de venta libre cobró especial relevancia en el país. De hecho, según cifras de la Asociación Latinoamericana de Autocuidado Responsable (ILAR) 84% de los latinoamericanos consideran que el autocuidado fue importante para contrarrestar la pandemia por COVID-19, pero solo el 48% asegura que cuenta con el conocimiento y las herramientas para autocuidarse responsablemente, sin necesidad de acudir a un profesional médico.
Pero el autocuidado no es únicamente un tema de cuidar la salud propia, es además una estrategia que beneficia la sostenibilidad del sistema de salud público. El gasto en salud que representa en la región la atención de dolencias como resfrío, diarrea, candidiasis vulvovaginal y lumbalgia en instituciones públicas, podría reducirse en un 92% mediante la comunicación responsable y la educación en hábitos para el autocuidado.
En esa línea, Vinicius Santos, director general de Sanofi CHC Cono Sur y COPAC señala que “el autocuidado promueve ahorros en el sistema de salud argentino, reduce los costos económicos por ausentismo laboral, empodera a los ciudadanos sobre su salud y fortalece la calidad de vida de la población”.
“Fomentar el autocuidado seguro y responsable es cada vez más importante ya que desempeña un papel fundamental para salvaguardar la salud pública, garantizar sistemas de salud eficientes, fortalecer y estabilizar la economía nacional, y dotar de mejor calidad de vida a las personas”, propone.
Automedicación responsable
De acuerdo con la Dra. Jimena Worcel, Directora Médica de la Cámara Argentina de Medicamentos de Venta Libre (CAPEMVeL), sería costoso e ineficiente para el sistema de salud hacer una consulta médica en cada caso de enfermedad leve. “La gente es responsable y sabe acudir a lo que llamamos ‘automedicación responsable’, donde reconoce la condición menor que padece y toma decisiones para sentirse mejor”, observa.
“Diferente es el caso de la ‘autoprescripción’, a través de la cual un individuo se autoprescribe un medicamento que es de venta bajo receta y lo adquiere sin presentar la receta, situación absolutamente censurable y que conlleva riesgo sanitario”, aclara.
A nivel global, la apropiación de acciones y productos de autocuidado por parte de los pacientes ha permitido el ahorro de 40,8 mil millones de días productivos y 1,8 mil millones de horas de citas médicas .
“El tiempo ahorrado por el personal de la salud le permite ocuparse en padecimientos más complejos que no pueden ser autogestionados por el paciente”, explica Vinicius Santos.
“Mediante un amplio portafolio de productos basados en ciencia, que atienden desde resfriados y problemas gastrointestinales, hasta alergias y dolor, en Sanofi estamos comprometidos con el enfoque de autocuidado y promovemos una mejor educación sobre el cuidado personal para apoyar y empoderar a las personas a cuidarse”, agrega.
En el marco del Día Internacional del Autocuidado resulta importante destacar que un ciudadano con conocimientos sólidos sobre el autocuidado, con hábitos de vida saludable, equivale a una mejor salud para un mayor número de personas, lo que beneficia no sólo al individuo, sino también a su familia, su comunidad y la economía en general.