Al parecer, el domingo en el Autódromo Rosamonte, las autoridades municipales detectaron mayor cantidad de personas que las permitidas por el protocolo. Además, registraron venta de entradas, sin la presencia de policías ni habilitación municipal. El predio fue clausurado.

En diálogo con MisionesCuatro, el piloto Gerardo Von Steiger dio su opinión sobre el tema y se mostró decepcionado por la situación y aseguró que hubo otros eventos en Oberá y Posadas donde si se respetaron los protocolos sanitarios.

Von Steiger calificó a la actividad del automovilismo local como una “industria” que genera trabajo y aseguró que por esta situación “quedó mucha gente colgada”.

El piloto lamentó la situación que se vivió el fin de semana en Posadas donde la capacidad fue de más de mil personas y había más de 505 automóviles en el predio; y aseguró que arruina el trabajo de muchos meses donde pudieron reactivar el automovilismo.

“En Oberá salió bien y el que no estaba registrado, no podía ingresar”, comentó sobre las actividades en el interior de la provincia. “El automovilismo estaba por el piso y un grupo de pilotos empezamos a trabajar”, agregó.

Específicamente sobre la clausura del autódromo de Posadas, Von Steiger explicó que los pilotos pagaban un canon para usar la pista. En la ciudad capital era de 5 mil pesos y ese dinero era para cubrir la falta de público y los gastos extras.

“Empezaron a hacer un negocio y quiero que me expliquen donde fue el dinero”, dijo el piloto apuntando indirectamente a la dirigencia. “Se le cobró 500 pesos a cada persona que ingresó”, detalló asegurando que al presenciar esta situación lo denunció con las autoridades responsables, aunque hicieron caso omiso.

Finalmente, Von Steiger pidió explicaciones a Carlos Malarczuk, presidente del Automóvil Club Misiones (ACM) y manifestó que “fue una vergüenza su publicación de hoy”, haciendo referencia al descargo realizado en redes sociales.

El descargo del ACM