
Los restos del tres veces campeón del mundo con la selección de Brasil, fallecido el pasado jueves, llegaron en la mañana de este lunes al estadio del club Santos (donde desarrolló casi la totalidad de su carrera de 1956 al 1974), para el velatorio de 24 horas que precederá al entierro el martes, en el Memorial Necrópole Ecuménica de San Pablo.
El cuerpo de Pelé fue trasladado a la madrugada y recibido con fuegos artificiales por numerosos fanáticos que aguardaban en las inmediaciones del Urbano Caldeira de Vila Belmiro.
Los hinchas que rindan tributo al astro brasileño ingresarán por una de las plateas de la cancha y retornarán los corredores formados por vallas, cerca del féretro ubicado dentro de una carpa en el centro del campo de juego.
En la despedida del astro brasileño se hicieron presentes el presidente de la FIFA, Gianni Infantino y el de la Conmebol, Alejandro Domínguez.
Embalsamado
El cuerpo de Pelé fue embalsamado para que el funeral se desarrolle con el féretro abierto.
Según el diario Lance, el procedimiento realizado es denominado tanatopraxia, que prepara el cadáver antes del entierro con el fin de asegurar una mejor apariencia a lo largo del velorio.
La preparación se realizó en una sala climatizada del Hospital Albert Einstein, mismo lugar donde el tricampeón mundial falleció a sus 82 años de edad.