BUENOS AIRES. La invasión de Rusia a Ucrania está generando subas significativas en el mercado de granos que opera en Chicago. Los precios de los principales commodities agrícolas se encuentran muy cerca de los récords históricos y los analistas no descartan que se superen en los próximos días.
De acuerdo con el portal LPO, tanto Rusia como Ucrania son dos de los mayores productores y exportadores de trigo. Este cereal subió 11 dólares este miércoles y cerró a 321 dólares por tonelada. En el caso de la soja, el alza fue aún más pronunciada. La oleaginosa aumentó 15 dólares y cotizó a 615 dólares. El máximo histórico se registró en 2012, cuando la soja cotizó a 657 dólares.
Antes del conflicto bélico, en la campaña 2021/22 Ucrania tenía previsto exportar 24 millones de toneladas de trigo. Cabe destacar que ese país es el primer exportador mundial de aceite de girasol (6,6 millones de toneladas por año). Y el cuarto exportador de maíz del mundo (33,5 millones de toneladas).
En ese contexto, varios economistas y especialistas en commodities anticipan una fuerte suba de precios en estos granos, dada la afectación de la producción y de la exportación en la península de Crimea. Esto implica, para los analistas, una oportunidad comercial/económica para la Argentina, un importante productor de soja, trigo y maíz.
Cabe subrayar que la cosecha de soja 2021/22 en el país, por el momento y en un contexto de sequía que parece atenuarse, está prevista en 40 millones de toneladas. En el caso del maíz, en tanto, se esperan alrededor de 48 millones de toneladas. Ambas cosechas registrarán bajas respecto a la campaña anterior producto de la falta de lluvias que viene golpeando al país desde hace meses.
Sin embargo, la guerra entre Rusia y Ucrania también disparó el precio del petróleo y el gas, dos insumos clave para la producción agropecuaria. Así, los costos de producción aumentan considerablemente entre los meses de marzo y mayo, en tiempos de cosecha gruesa para la soja y el maíz.
En esta línea, no son pocos los que empiezan a plantear en el campo una serie de dudas acerca del accionar del Gobierno nacional si la suba de valores internacionales de los commodities agrícolas presiona sobre el precio de los alimentos derivados del trigo y el maíz.
Para el economista Gerardo Alonso Schwarz, un asesor de la IERAL, es inevitable que los incrementos en las commodities lleguen a las góndolas, en particular, en el caso del maíz y el aceite de maíz. Lo mismo podría ocurrir con el trigo –y el pan- y con la soja –empleada en numerosos alimentos procesados.