
El conflicto bélico subsiguiente resultó en la recuperación de las Islas Malvinas, así como de las Islas Georgias del Sur y Sandwich del Sur, por parte de las fuerzas armadas británicas. Estos territorios, junto con sus zonas marítimas adyacentes, han estado bajo control británico desde entonces.
Las Naciones Unidas reconocieron esta situación como un caso de colonialismo. A pesar de los esfuerzos de Argentina por buscar una resolución diplomática al conflicto, hasta la fecha no se ha establecido un diálogo efectivo entre las naciones involucradas sobre esta cuestión.