POSADAS. María fue integrante del FOL durante dos años, fue echada del grupo recientemente por no cumplir con todas las ‘diligencias’, y en diálogo con Misiones Cuatro señaló una serie de desmanejos de los que fue testigo y damnificada.

Presiones, cuotas mensuales irregulares a cambio del acceso a planes, y persecución fueron algunas de las maniobras que sufren dentro de la organización.

Disponibilidad full time

“En plena pandemia, ellos querían que uno esté siempre dispuesto para ellos, a estar de acá para allá, a hacer militancia en el Cabildo (merendero), a hacer otros trabajos comunitarios a parte de la merienda”, contó.

Cuotas y sanciones

“Todos los meses había que pagar una cuota y si no pagabas la cuota, había una sanción y tenías que pagar con intereses”, dijo María. Todas estas presiones se daban con la amenaza de quitarles el Salario Social Complementario (SSC), que son poco más de 8 mil pesos mensuales.