En medio de la campaña por las elecciones legislativas, el presidente Alberto Fernández busca ocupar espacios y hacer olvidar el escándalo que generó la filtración de fotos del festejo de cumpleaños de su pareja Fabiola Yáñez, en la quinta de Olivos plena cuarentena estricta.

Después de un pedido de disculpas en el que culpó a Yáñez por “el brindis”, Fernández arribó a Misiones para encabezar un acto en Puerto Iguazú para presentar el programa Previaje, un plan de incentivos para la contratación anticipada de servicios turísticos nacionales. 

No volvió a aludir en ningún momento a la polémica, si mencionó varias veces a su pareja. Según dijo, Fabiola “quiere mucho a Misiones” y le hablaba maravillas de las Cataratas de Iguazú, que Fernández tenía como telón de fondo.

“El tiempo más ingrato de la pandemia ha terminado. Está terminando con la vacunación”, declaró el Presidente después de recordar que “la gastronomía y la hotelería fueron las grandes víctimas de la pandemia”.

Fernández recordó que con la pandemia “el mundo cerró el turismo” y que “muchos tuvieron que cerrar sus negocios”. En este sentido, afirmó que con el programa Previaje el Gobierno busca “devolver el kiosko al que lo perdió, el barcito al que lo perdió”.

Pedido de disculpas

Este viernes, Fernández “lamentó que haya ocurrido” la reunión sin distanciamiento ni barbijos cuando regía el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio en el país.

“El 14 de julio, día del cumpleaños de mi querida Fabiola, ella convocó a una reunión, un brindis con amigos que no debió haberse hecho. Lamento que haya ocurrido. Mirando en retrospectiva, debí haber tenido más cuidados que los que evidentemente tuve”, sostuvo el mandatario en medio de aplausos durante un acto en Olavarría.