“El incremento fue este mes de enero. Los meses anteriores eran números estándares”, informó, señalando un aumento significativo en el costo de los servicios funerarios en un período relativamente corto. La situación se vuelve aún más apremiante con el aumento repentino de fallecimientos en los últimos diez días.
Melgarejo explicó que las funerarias están enfrentando momentos difíciles debido a un incremento considerable en logísticas, que en algunos casos superan el 100%. Esto, combinado con la difícil situación económica de quienes demandan el servicio, crea un escenario desafiante para ambas partes.
“Nosotros estamos con incrementos en logística, toda la provisión de féretros, metálica, energía, combustible y paritarias”, destacó. El secretario resalta la necesidad de ajustar los precios para garantizar salarios justos para los trabajadores, pero se enfrenta a obstáculos en las negociaciones con obras sociales y aseguradoras.
“El servicio de cremación está al mismo precio que un servicio mínimo funerario, que tendría que arrancar en 350 mil pesos”, reveló Melgarejo. A pesar de ser una alternativa aparentemente más económica, la cremación también experimentó un aumento de costos y ronda aproximadamente los 250 mil pesos.
La situación, según el secretario, es difícil, ya que las funerarias se ven obligadas a negociar con aseguradoras mientras intentan mantenerse al día con la inflación.