PUERTO IGUAZÚ. El escándalo nacional por las denuncias por abuso sexual y acoso contra el juez de Familia y Violencia Familiar nº 2 de Iguazú, Pedro Fragueiro, sumó otro capítulo este martes, con las declaraciones de una de las dos denunciantes, Mili, quien aseguró a MisionesCuatro que “siente miedo” y que familiares del magistrado ya amenazaron a sus hermanos.

Luego de describir varias situaciones de acoso sexual en su trabajo –Mili se desempeñaba en el juzgado-, durante dos meses, la joven de 23 años describió entre lágrimas, el episodio más brutal vivido: cuando Fragueiro intentó besarla por la fuerza, según la denuncia. “Él me abraza con fuerza, mide el doble de alto que yo y me empieza a pasar la lengua por el cuello y hablarme al oído”, expresó la joven, visiblemente conmocionada por el ultraje sexual sufrido.

“Tengo mucho miedo, ahora voy a ser la persona problemática”, expresó la joven que denunció penalmente a Fragueiro por abuso sexual simple.

Dos denuncias por abuso sexual contra el juez y ¿protección del STJ?

Según consigna Clarín, Fragueiro, enfrenta dos denuncias por acoso y abuso sexual. La primera en denunciarlo fue una joven que lo conoció en su rol de formador de árbitros de rugby. Y este martes se sumó la empleada judicial que la semana pasada había revelado en sus redes sociales los acosos que sufriera en manos del magistrado.

Apenas se había conocido la acusación pública, Fragueiro habría tenido la intención de renunciar a su cargo para evitar un escándalo mayor. Sin embargo, avalado por un sector del poder judicial y del poder político, el juez se mantiene en el cargo. Tomó licencia hace más de un mes y no hay investigación interna de la Justicia. Ni mucho menos un pronunciamiento político en su contra.

En este sentido, cabe remarcar que el Superior Tribunal de Justicia no se pronunció sobre la situación. Y ni siquiera abrió un sumario administrativo por las denuncias de acoso y abuso sexual. Ello pese a que el Colegio de Abogados de Misiones exigió que el Superior intervenga de inmediato.

De acuerdo con el diario nacional, Marina Romero, una joven que se topó con Fragueiro en 2017, fue la primera en denunciarlo. Ella intentó incursionar en el mundo del arbitraje de partidos de rugby. Marina dijo que se animó a contar su historia después de leer el posteo de Mili, la empleada judicial de Puerto Iguazú que puso al descubierto al juez y este martes habló con MisionesCuatro.

Por otra parte, la empleada judicial confirmó a este medio que la esposa de Fragueiro amenazó a familiares suyos. “Presenté mi denuncia y minutos después la esposa del juez se hizo presente en el estudio jurídico de mis padres y amenazó a mi hermano, diciendo que no iba a parar hasta vernos muertos y que cómo nos atrevimos a denunciar”, reveló Mili. Asimismo, la joven aclaró que su hermano ya se presentó en Fiscalía para realizar la denuncia correspondiente por las amenazas.