Cinco argentinos, entre ellos un nene de 3 de años, oriundo de Puerto Iguazú, fallecieron este martes durante la madrugada en un trágico accidente ocurrido en la ruta BR-277 de Brasil, que tuvo como protagonista a un colectivo de larga distancia de origen brasileño. Si bien se desconocen las causas, el testimonio de un pasajero apuntó contra el chofer, a quien acusó de quedarse dormido.
“No tuve ninguna reacción. Sé que no lo hizo a propósito, pero yo no reaccioné”, sostuvo Alexandro de Oliveira Gamaro, uno de los 48 sobrevivientes, en diálogo con O’Globo.
“El autobús se volcó a nuestra derecha, yo estaba junto a la ventana, no me hice daño porque me agarré al asiento, pero no me di cuenta de lo que estaba pasando. Mi amigo de al lado rompió la salida de emergencia, y él y yo comenzamos a sacar a la gente. Nos bajamos de atrás del bus y subimos por un barranco”, comentó.
El ómnibus llevaba a bordo a 54 pasajeros, entre ellos al menos 14 argentinos y varios paraguayos, franceses y alemanes. Había salido de la ciudad de Florianópolis, del estado de Santa Catarina, con destino a Foz de Iguazú, Paraná.
En total, siete personas murieron, (cuatro de Misiones) en tanto, cuatro hombres y una mujer, que todavía se desconocen sus identidades. El resto de los pasajeros que resultaron heridos, aproximadamente 20, fueron trasladados a los centros de salud ubicados en la región central de Paraná.