Lula preso: afirman que el fanatismo podría traer muertes

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Lo advirtió el polítólogo Fernando Santacruz, que analizó el caso del ex presidente Lula Da Silva, detenido en el marco de la megacausa por corrupción del Lava Jato. Pidió no caer en una mirada simplista y pasional. “Lula Da Silva y Michel Temer, fueron aliados por 14 años. No hay víctimas ni victimarios”, aseguró.[/vc_column_text][vc_column_text]POSADAS. De acuerdo con el politólogo radical Fernando Santacruz, el “fanatismo” podría conducir al derramamiento de sangre en Brasil, tras la detención del ex presidente Luiz Inácio Lula Da Silva. El investigador remarcó que en el vecino país, las instituciones siguen funcionando y la Justicia, falló en dos oportunidades respecto de la culpabilidad de Lula en una causa por presunta coima en la causa Lava Jato.

Para este politólogo, la detención de Lula Da Silva –condenado a 12 años de prisión por presuntas coimas de una empresa contratista de Petrobras-, se da en dos planos, el jurídico y el político. “Las instituciones de Brasil están funcionando, hay estado de derecho. Hay una justicia que falló en dos instancias, está funcionando”, sostuvo el analista.

Contrario a los planteos del PT (Partido dos Trabalhadores) y del kirchnerismo duro, Santacruz sostuvo que “no hay un procedimiento ilegal” en la detención del ex presidente.

“En el plano político hay interpretaciones (contrapuestas) debido a una fuerte grieta”, comentó el politólogo, en referencia a las posiciones irreconciliables que genera el ex mandatario y candidato presidencial.

En esta línea, Santacruz le bajó el tono a las teorías conspirativas de los seguidores de Lula, al resaltar que el actual presidente y señalado como el enemigo político del ex presidente detenido, fue un aliado durante su gobierno. “Lula Da Silva y Michel Temer, fueron aliados durante 14 años. Hay que hacer un análisis muy cuidadoso y no caer en el facilismo. No hay víctimas ni victimarios”, opinó Santacruz sobre el pedido de detención firmado por el juez federal de Curitiba, Sergio Moro –el impulsor del Lava Jato.

“Hay que dejar de lado el fanatismo para que no haya muertos en Brasil”, advirtió el politólogo, poniendo de relieve uno de los riesgos de una movilización en pos de la liberación del ex mandatario.

“Si con el correr de los días hay más manifestaciones, podemos estar ante hechos de violencia. Hay que dejar que las instituciones del Estado funcionen y no apelar al fanatismo de la gente. Hay que ser cuidadoso porque el efecto político que pueden tener las manifestaciones a favor y en contra, es un enfrentamiento con tintes violentos, que puede desembocar en muertes”, enfatizó el investigador.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]