POSADAS. Durante la Semana Santa, un vecino del barrio Evita fue atacado por un perro pitbull, por este hecho se generó una gran polémica con opiniones encontradas. Al respecto el médico veterinario Juan Pablo Luzuriaga (MP 306) en diálogo con Misiones Cuatro explicó cuáles son las razones que llevan a un perro a atacar a una persona.

El veterinario aseguró que no hay razas que son más agresivas que otras, sino que “son lo que nosotros criamos”. En ese sentido señaló que siempre hay razas que se ponen de moda por ser consideradas agresivas, como el Rottweiler, Dóberman​, el Ovejero, y actualmente el Pitbull.

“Cada perro que supera los 15 kilos cuando le llega su primera consulta lo que el veterinario hace es tener una charla etológica y le va a enseñar principalmente cómo criar a su animal. Nosotros tratamos muchísimo ese tema y se trata de generar que el perro sea lo más sumiso posible”, explicó el médico veterinario.

El profesional sostuvo que este tipo de perros puede llegar a heredar solo un 20 por ciento de su carácter, mientras que el 80 por ciento es responsabilidad del ambiente en el que se cría.

“En estas razas es importante exponerlo a todos los estímulos posibles, a chicos a otros perros, y estar principalmente entre los primeros cuatro meses al lado del perro para que cuando tenga un intento de reaccionar tratar de corregirlo”, contó.

En esa misma línea señaló que para corregir al animal lo primero que se debe hacer es acudir al veterinario para que se realice unas pruebas que determinaran el nivel de agresividad o el carácter del perro, para ello es necesario que el dueño del animal se muestre firme y que además no haya golpes de por medio.

“En un pitbull es muy importante realizar un aplauso fuerte y tratar de armarse un diario con una bolsa adentro y cuando empiece a morder que nosotros lo tomamos como un juego, pero no lo es”, manifestó Luzuriaga.

Por otro lado, el veterinario explicó que un factor que puede contribuir a la agresividad de un perro es la “humanización excesiva”. “Cuando empezamos a darle otras prioridades al animal, que es muy común que se de en los perros muy chiquitos, que si medimos la agresividad en estos perritos que siempre los estamos protegiendo y eso refuerza la conducta”, dijo el profesional.

En ese aspecto aseguró que los perros a los que “tenemos guardados” sin exponerlos a los estímulos son los más propensos a tener problemas de conducta, es por ello que afirma que la etología es la solución para corregir este comportamiento.

“El perro toda la vida va a querer ser alfa, por eso si lo dejamos va a tener problemas, por eso siempre lo tenemos que llevar al escalón más bajo de la escala social”, concluyó.