“A lo largo del año, enfrentamos un trabajo permanente y constante, con altibajos, pero en general, hemos experimentado un aumento constante en la cantidad de comensales y beneficiarios, que se intensificó en estos dos últimos meses superando las demandas del año”, expresó.
El responsable del comedor lamentó que, en algunos momentos, tuvieron que decir no a ciertas solicitudes debido a limitaciones de recursos. “Llegamos con los recursos, a veces compartiendo. Duele decir que no, pero lo tuve que hacer”, admitió, evidenciando las dificultades que enfrentan para satisfacer todas las necesidades.
Núñez señaló que el comedor recibe a diversos sectores de la población, incluyendo adultos mayores y personas en situación de calle. Durante las festividades, la demanda se intensifica aún más, ya que algunos comedores cierran temporalmente. Sin embargo, a pesar de la creciente demanda, Núñez destacó que la institución depende de Desarrollo Social de la Nación y hasta el momento recibieron apoyo de manera regular.
“El balance del año no es positivo porque la situación económica no amerita. Rogamos que tengamos un año entrante mejor y podamos salir adelante”, concluyó, resaltando la importancia de contar con un contexto económico más favorable para poder continuar brindando ayuda a quienes más lo necesitan.