La rotisería ofrece un amplio menú del día, que consta de 16 opciones diferentes, con un costo de 1200 pesos por día. Su clientela principal está compuesta por estudiantes y trabajadores de reparticiones públicas que buscan una opción conveniente y sabrosa para llevar como vianda.

Delgado comentó sobre los retos que enfrenta a lo largo del mes: “Desde el 15 de cada mes merma un poco, aunque soportamos la situación”. Esta fluctuación en la demanda es una realidad con la que muchos negocios deben lidiar.

El propietario señaló que los clientes utilizan tanto efectivo como tarjetas para realizar sus compras, lo que refleja la necesidad de adaptarse a diversas formas de pago para mantener el negocio en funcionamiento.

A pesar de los desafíos, Delgado destacó la importancia de encontrar soluciones creativas: “La demanda bajó, se gana menos y se trabaja más, aunque hay que buscarle la vuelta”. Estas palabras reflejan la determinación de los dueños de negocios locales para mantener sus establecimientos en funcionamiento.

Delgado también elogió a su equipo de empleados, resaltando la calidad de la comida que sirven: “Tengo empleados que cocinan muy bien y un parrillero de primera. Es un trabajo familiar y vale mucho”. Esto subraya la importancia de la colaboración y el esfuerzo conjunto en tiempos difíciles.