El aumento repentino desató una variedad de reacciones entre los usuarios del transporte público. Algunos expresaron su indiferencia, argumentando que no utilizan este medio de transporte. Otros, sin embargo, manifestaron su preocupación y frustración ante la difícil situación que enfrentan:
“Es de terror, apenas tengo para los $330 del pasaje de ahora. Cagué la Sube y no me sale el QR, estoy luchando con esto y termino pagando en efectivo. No sé cómo voy a viajar. Estoy totalmente en contra. Encima estoy esperando hace una hora el colectivo”, compartió uno de los entrevistados.
“Creo que antes de subir las cosas, deberían mejorar el servicio. Hay escasez de colectivos. Pasan llenos o fuera de servicio. Estoy esperando hace media hora y pasan todas las unidades llenas”, señaló otro.
“No sabía que subió. Es mucho para uno que viaja todos los días. Estoy totalmente en contra porque viajo todos los días y encima tengo chicos en el colegio”, expresó otra persona, resaltando el impacto negativo que esta medida tiene en las economías familiares.
Entre las opiniones recopiladas, también hubo quienes consideraron que, si el aumento está destinado a mejorar el servicio, podría tener una recompensa a largo plazo. Sin embargo, la falta de aviso previo generó descontento y desconfianza entre los usuarios.