Fueron numerosos los reclamos que se realizaron tanto al municipio, como a la provincia, pero nada de esto sirvió, la empresa que solo cuenta con 4 líneas (14,16,23 y 28), se vio ahogada y con la imposibilidad de pagar a sus trabajadores y al borde de dejar de prestar los servicios que brindan hace varias décadas en la ciudad capital.
Mientras tanto, el municipio en vez de saldar la deuda o tratar de sostener un servicio que tiene buenas críticas, informó a la empresa afectada que licitará las líneas que le pertenece, abriendo la jugada a que el grupo Z de Marcelo Zbikoski se quede con el Monopolio absoluto del servicio de transporte metropolitano.
Las maniobras resultan casi evidentes, el grupo mayoritario amigo del poder renovador al que siempre le molestó el servicio que brindaba su única competencia, está logrando su cometido… pese a las quejas de los usuarios y a que brindan un servicio con pocas frecuencias, con coches en mal estado, con alternativas de pago que no funcionan y mantienen como rehenes a quienes lo ocupan. La empresa que vive haciendo paro y deja varadas a miles de personas o cambia el recorrido de manera arbitraria puede más que el propio pueblo.
Lamentablemente, pese a que los usuarios posadeños felicitan y aclaman que a que la empresa Bencivenga llegue a más barrios, entre gallos y medianoche, tejes y manejes la misma podría dejar de funcionar a fines de enero.
Además, trascendió que, mediante las diversas notas elevadas a las autoridades provinciales, no fue posible extender la concesión, como se produjo en otra empresa que opera en Posadas.
M.F