BUENOS AIRES. Como gesto a ala ultrakirchnerista, el presidente de la Nación, Alberto Fernández designó a la fiscal Cristina Caamaño, titular de Justicia Legítima, como interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).

El presidente recibió en Casa Rosada a Caamaño, acompañado por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero y terminó con el suspenso que acarreaba el cargo, acaso el más importante de los que quedaban por designar en su Gobierno.

De acuerdo con LPO, en septiembre último, Caamaño reavivó la polémica sobre una posible reforma de la Constitución y le recomendó a Alberto avanzar en ese sentido para recortarle poder a los jueces federales de Comodoro Py.

Pero la jefa de Justicia Legítima, no sólo le pidió a Alberto una reforma sino que además reflotó el proyecto de Cristina Kirchner para “democratizar” la justicia. Se trata de aquella iniciativa para que los jueces sean elegidos y removidos por “voto popular”, que terminó en un estruendoso fracaso de la ex presidenta.

Justamente, ese proyecto le valió a la actual presidente del Senado, el enfrentamiento con la casi la totalidad de los jueces y fiscales de Comodoro Py.

Caamaño le recomendó a Fernández “ampliar” la cantidad de juzgados federales de Comodoro Py para “diluir su poder”. “Si en lugar de 12 jueces y 12 fiscales fueran más, no todas las causas le caerían a (Claudio) Bonadío”, argumentó la abogada sobre el juez que se hizo cargo y avanzó en la causa de los cuadernos de las coimas.

Este viernes insistió con esa idea. “Si queremos disminuir el poder de Comodoro Py habría que ampliarlo”, dijo a Radio Mitre.