“Pedimos colaboración para una olla comunitaria porque fuimos afectados por la intensa lluvia”, expresó Giménez, describiendo la difícil situación que enfrentan muchas familias en su comunidad. Según su testimonio, al menos 17 familias quedaron con sus casas inundadas y en situación de necesidad.

Aunque llegó cierta asistencia, Giménez señaló que no es suficiente para satisfacer las necesidades de todos, especialmente considerando la cantidad de niños en la comunidad. “Estamos refugiados en una Iglesia”, agregó, destacando la falta de vivienda adecuada para muchas familias que aún no han podido regresar a sus hogares.

La tarea de limpiar el desastre causado por las inundaciones ha comenzado, pero Giménez enfatizó que aún queda mucho por hacer. “Estamos limpiando el desastre que hizo el agua”, afirmó, describiendo los esfuerzos de la comunidad para recuperarse de la tragedia.

En total, la comunidad de Aldea Ivoty Okara cuenta con 34 familias, pero la cantidad de niños afectados supera los 100. Ante esta situación, Giménez y otros residentes hacen un llamado urgente a la solidaridad y la ayuda de la comunidad más amplia para superar este difícil momento juntos.