Preocupación de empleados estatales de la provincia por la pérdida del poder adquisitivo de sus salarios en relación a la inflación. Los tarifazos de los últimos años dejaron por el piso el sueldo de los trabajadores que ahora piden “medidas” al nuevo gobierno para palear la grave situación económica que atraviesan.

Según Jorge “Coki” Duarte, secretario general de ATE el desfasaje entre lo que cobra y lo que debería percibir un trabajador es inmenso.

En ese sentido explicó que el costo de una familia tipo en la provincia para sostenerse supera los 38 mil pesos de ingreso. “Muchos trabajadores apenas superan los 10 mil pesos de ingresos. Otros con suerte llegan a los 20 mil pesos, como en Salud Pública”, agregó.

Consultado por la posibilidad de solicitar un bono de fin de año, Duarte manifestó que piden que el bono primavera, otorgado en tres cuotas, permanezca en el sueldo de los estatales. “Debe quedar en forma fija bajo alguna figura en los ingresos”, sentenció.