Streski destacó que la desaparición de personas es una preocupación que afecta profundamente a algunos países de América Latina, con un número significativo de desaparecidos cada día. Antes de la desaparición de su hijo, no estaba consciente de la magnitud del problema.

La madre compartió el mensaje de su hijo, que fue uno de los últimos que recibió antes de su desaparición, expresando su amor y cariño. Cuando dejó de recibir noticias de él y notó que había dejado sus redes sociales abiertas y sus pertenencias atrás, se dio cuenta de que algo grave había sucedido.

Streski explicó que, al acercarse a la policía para reportar la desaparición de su hijo, no recibió una respuesta adecuada. Este desencuentro inicial la llevó a unir fuerzas con otras familias que estaban enfrentando situaciones similares. Lo que comenzó como un pequeño grupo de cuatro familias se convirtió en una red de más de 100 familias que se apoyan mutuamente en su búsqueda de sus seres queridos desaparecidos.

La madre dedicó su vida a la búsqueda de su hijo y se convertió en una especie de detective, especializándose en sistemas de búsqueda y formación para encontrar a las personas desaparecidas. A pesar de los desafíos y obstáculos, lograron algunos avances en la búsqueda de los desaparecidos.

Respecto a los detenidos por la desaparición de su hijo, Streski lamentablemente informó que fueron liberados y que hasta el momento no han podido establecer ninguna conexión sólida en el caso.

La historia de Isabel Streski es un testimonio del dolor que enfrentan muchas familias en la región debido a la desaparición de sus seres queridos, así como de la valentía y determinación de quienes se convierten en defensores incansables en la búsqueda de respuestas y justicia.