[vc_row][vc_column][vc_column_text]El jueves en Ituzaingó, se expondrá acerca del emplazamiento de tres nuevas turbinas en el brazo Aña Cuá de la central hidráulica sobre el Paraná. Asistiría el ministro de Energía, Juan José Aranguren, directivos de la EBY, autoridades argentinas, paraguayas y periodistas.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=”130241″ img_size=”full” alignment=”center” title=”Foto Última Hora.”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]POSADAS. La Argentina y Paraguay impulsan la instalación de tres nuevas turbinas en la presa de Yacyretá, sobre brazo ubicado en margen derecha llamada Aña Cuá por donde se descargan a través de 14 vertederos, 1.800 metros cúbicos de caudal sin utilización alguna.
De acuerdo a informaciones recogidas por MisionesCuatro, para ejecutar este proyecto se convocará a dos licitaciones conjuntas: una para la ejecución de obras civiles y otra para la provisión de turbinas, a un costo estimado en 580 millones de dólares
Características
Hace años que ambos gobierno vienen evaluando comenzar dicha obra -a la que el actual director ejecutivo de la EBY calificó de “compleja”– lo que permitirá repotenciar la mayor usina de la Argentina en sociedad con Paraguay. Cada una de las máquinas tipo Kaplan de eje vertical (igual a las 20 que operan en la central), producirá 85 megavatios, lo que implica un aumento de potencia de 270 megavtios, un 10% de la que genera actualmente Yacyretá, de cuyo total nuestro país consume alrededor el 90%, conforme sucesivos acuerdos bilaterales.
Al estar de estimaciones técnicas, los trabajos brindarán mano de obra a 300 personas durante cuatro años. En rigor, Aña Cuá fue un proyecto de iniciativa privada presentada a fines del siglo pasado, por la empresa Pescarmona (IMPSA). Posteriormente sufrió modificaciones, no obstante la misma electromecánica mendocina en sociedad con la paraguaya CIE, propiedad del ex presidente Juan Carlos Wasmosy, actualmente reacondiconan turbinas que sufrirán daños en sus álabes, al haber girado antes de ser llenado totalmente el embalse.
Por otra parte, también se contempla instalar en Aña Cuá un nuevo ascensor para peces, lo que facilitaría la repoblación de la ictiofauna del Paraná aguas arriba, que sufrió una lamentable merma por carencia de controles aptos.
Ello obliga a los organismos ambientalistas dependientes de la EBY que tienen como objetivo incrementar las especies criadas en estaciones de piscicultura, evitando además la depredación en margen derecha del río debajo del dique, especialmente en la zona de Ayolas.
sb
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