[vc_row][vc_column][vc_column_text]Cuando John Carpenter estrenó “El enigma de otro mundo”, en 1982, recibió una sucesión de malas críticas, por ello la proyección del filme en el Festival de Cannes significó para el cineasta “una increíble revancha”.[/vc_column_text][vc_single_image image=”239832″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]“La gente la odió (a ‘El enigma de otro mundo’) y nunca entendí por qué”, confesó Carpenter durante una clase maestra en la que público lo ovacionó de pie, antes incluso de que la sesión comenzara.

Carpenter acudió al certamen francés para recibir la Carroza de Oro, un homenaje del gremio que la sección paralela Quincena de Realizadores otorga a cineastas que han marcado la historia del cine por su independencia, ambición y audacia, señaló EFE.

“Todo lo que me interesa es escuchar gritos. Cuando hice ‘El enigma…” sentí que había una regla tácita en Hollywood en la que si haces una película de horror tienes que poner los monstruos en la oscuridad, que no deben verse directamente, y yo hice lo contrario, me dije que hay que verlos para creer que existen”, destacó el también autor de “El príncipe de las tinieblas” y la saga de “Halloween”.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][/vc_column][/vc_row]