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Banfield le ganó al equipo “muletto” de Racing

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El Taladro se impuso de local por 1 a 0 con gol de Darío Cvitanich. Racing que arrancó el partido con suplentes, y terminó con titulares al verse claramente superado por el conjunto del sur. La Academia reservó jugadores para la Sudamericana.

Banfield le ganó al equipo “muletto” de Racing

[vc_row][vc_column][vc_column_text]El Taladro se impuso de local por 1 a 0 con gol de Darío Cvitanich. Racing que arrancó el partido con suplentes, y terminó con titulares al verse claramente superado por el conjunto del sur. La Academia reservó jugadores para la Sudamericana.[/vc_column_text][vc_media_grid element_width=”6″ grid_id=”vc_gid:1505684849391-b31c76d8-dbe7-4″ include=”131389,131390″][vc_column_text]BUENOS AIRES. Le podrá ir mejor o peor, pero Banfield nunca falta a la cita. Siempre dice presente, acá estoy… Con sus armas, con su estilo, el equipo de Falcioni se convirtió en uno de los rivales más difíciles que puede tocarle a cualquier equipo del fútbol argentino. Y contra Racing, este domingo en el Florencio Sola, demostró una vez más que sus jugadores tienen bien aprendido el libreto de su DT.

Equipo solidario para correr y recuperar la pelota cuando no la tiene y para correr y generar opciones de pase cuando sí se hace dueño del balón. La posesión o no es indiferente cuando se trata del esfuerzo físico en pos del objetivo. Pero claro, el Taladro no sólo corre. Si no, Usain Bolt podría jugar en este equipo. Lo que distingue al conjunto de Julio César es que tienen un plan y saben cómo llevarlo a cabo.

El ataque al espacio, la fórmula preferida por Falcioni dentro del menú de variantes que ofrece el fútbol, funcionó a la perfección en ese primer tiempo en el que sacó la diferencia en el juego y también en el marcador. La jugada del gol, una vieja fórmula: saque lateral ejecutado rápido, Mouche que le gana a su marcador y envía un centro perfecto, con comba de afuera hacia adentro para el que llegue, que Darío  Cvitanich conecta de cabeza por el segundo palo.

Si Banfield se mostró como un conjunto que supo a qué jugaba, este Racing remendado, con muchos suplentes, fue la antítesis. Línea de cinco atrás, tres volantes y dos delanteros (uno y medio teniendo en cuenta que uno de ellos fue el colombiano Ibargüen) fue el dibujo pero al envase le faltó contenido. Con las líneas alejadas entre sí, buscando el pelotazo y la segunda jugada, los de Cocca deambularon durante todo el primer tiempo sin poder hilvanar una sola situación clara de gol.

Recién cuando ya había comenzado el segundo tiempo, Cocca se la jugó, obligado por el resultado adverso, y buscó ser (más) ofensivo: el pibe Ojeda, un volante ofensivo, por Torsiglieri, un defensor. Así, se paró 4-3-1-2 y el nuevo refuerzo proveniente de Ferro mostró algunas cositas interesantes a la hora de manejar la pelota. Al toque metió a la dupla atacante titular, reservada para el revancha con Corinthians, formada por Licha López y Triverio, y el equipo arrimó mayor peligro al arco defendido por Altamirano pero no lo suficiente como para merecer el empate.

(Fuente: Olé)[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][/vc_column][/vc_row]

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