“Aunque muchos se nieguen a creerlo, las condiciones están dadas para que en algún momento se provoque un tsunami en el Sur de la Costa Atlántica”, advierte desde Ushuaia el investigador Jorge Rabassa a Infobae.
Las ciudades de Río Grande y Rio Gallegos son las que se verían muy afectadas, tanto por su ubicación cercana a la Falla de Magallanes como por lo bajo de sus costas. “Puedo decirle que Río Gallegos cuenta con una gran barra arenosa. En el caso de un sismo o tsunami, esa cresta de arena semi sumergida actuaría como una especie de estructura de defensa que absorbería parte de esa energía”, explicó.
No es la primera vez que alerta: hace años que este científico –geólogo y doctor en Ciencias Naturales y doctorado en la Universidad de New York–le viene pidiendo a las autoridades que tomen medidas para templar el impacto que podría tener un maremoto sobre las ciudades más australes de la Argentina.
“Lo que intento es concientizar a las personas y a los gobiernos. Hay una gran ignorancia sobre el tema, pero yo sigo tratando de ayudar en crear conciencia: los sismos y tsunamis existen y son posibles en nuestro país”, declaró Rabassa en su momento.