[vc_row][vc_column][vc_column_text]Rocío Santa Cruz, la ex Miss Argentina y esposa de Claudio Ferreyra -sobrino del ex presidente de EMSA Sergio “Pity” Ferreyra-, enfrenta el juicio oral y público por el asesinato de Ramón “Topo” Cabrera, luego de dos años de ocurrido el siniestro vial. Este martes, se concretará la segunda jornada del debate que preside el juez César Jiménez.[/vc_column_text][vc_single_image image=”210415″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]POSADAS. A partir de las 9 de este martes, arranca la segunda audiencia en el juicio oral y público contra la ex reina de belleza Rocío Santa Cruz, acusada de homicidio culposo por conducir borracha cuando chocó la moto del empleado municipal Ramón “Topo” Cabrera, a quien abandonó a su suerte, a fines de Enero del 2016.

La abogada posadeña y ex Miss Argentina, Rocío Santa Cruz (33), acusada de provocar la muerte de Ramón ‘Topo’ Cabrera (53), quien se negó a declarar ante el tribunal unipersonal del Juez Correccional y de Menores Dos, César Raúl Jiménez, no está acusada de “abandono de persona”, delito que agravaría su situación procesal.

Los nexos con el poder político de esta ex empleada de la AFIP, que está casada con Claudio Ferreyra –un funcionario del Ministerio de Turismo que es sobrino del ex presidente de EMSA, Sergio Pity Ferreyra-, parecen haber jugado un papel al momento de dilatar la concreción del juicio y, a la vez, en la instrucción penal que la benefició con la imputación de homicidio culposo.

Este martes está previsto que declaren cinco testigos entre los cuales aparecen los policías que intervinieron en la localización de Santa Cruz durante esa mañana –cabe destacar que la abogada no denunció el siniestro vial y, aparentemente, se ocultó en su vivienda.

Asimismo, también declararían los médicos forenses que trabajaron en la determinación de la causal de muerte de Cabrera.

Entre los uniformados aparece la especialista que practicó el alcotest a la imputada, además de la bioquímica interviniente, cuyos aportes serán clave para debatir sobre la cuestión del alcohol al volante.

Según la defensa de Santa Cruz, que encabezan los prestigiosos penalistas Eduardo Paredes y José Luis Rey, la acusada no había tomado alcohol en los momentos previos al siniestro vial. Para ellos, a Santa Cruz le detectan 0,88 g/l en sangre en el mediodía del día de los hechos, porque estuvo tomando un tía maría –licor de café-.

Para la querella, ese valor de alcohol corresponde a lo que se espera encontrar en el cuerpo de una persona que llevaba más de seis horas metabolizando alcohol. El choque fatal ocurrió alrededor de las 6 y Santa Cruz fue encontrada por la policía cerca de las 12, y gracias al testimonio de un remisero que siguió el Peugeot 408 que conducía la abogada.

El cálculo retrospectivo de la bioquímica –si se considera que Santa Cruz había estado bebiendo en la despedida de soltera a la que acudió antes del choque- marca que, al momento del hecho, la imputada tendría no menos de 1,45 g/l de alcohol en sangre.

Cabe aclarar que las pericias del caso indican que Cabrera también estaba alcoholizado con 1,59 g/l en sangre. La estrategia de la defensa, se apoyará justamente en este punto: la culpa concomitante de la víctima en el siniestro fatal.

Por otra parte, también está previsto también que declare un automovilista que circulaba por el lugar al momento del impacto. Esa declaración podría concretarse antes de los alegatos a cargo de la fiscal María Laura Álvarez y los abogados defensores de la ex modelo, Paredes y Rey.

Como Santa Cruz está acusada de homicidio culposo, la pena máxima que podría recibir es la de cinco años de prisión.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]

jmm.

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