Posadas

Los ferrys siguen abandonados

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La reparación de los barcos Exequiel Ramos Mejía y Roque Sáenz Peña todavía no se concretó, a pesar de haber sido anunciada hace más de un año atrás.

Los ferrys siguen abandonados

[vc_row][vc_column][vc_column_text]La reparación de los barcos Exequiel Ramos Mejía y Roque Sáenz Peña todavía no se concretó, a pesar de haber sido anunciada hace más de un año atrás.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Analía Colazo es hija de Sixto Ramón Colazo, último jefe de la zona fluvial Posadas antes que se construyera el puente Roque González de Santa Cruz.

Dialogó con MisionesCuatro acerca del estado actual de las embarcaciones que permanecen en Nemesio Parma a la espera de ser restauradas hace más de un año.

Colazo indicó que serán necesario 4 millones y medio de dólares para reparar cada ferry. Agregó que el Gobierno adujo que no cuenta con fondos para realizar esta restauración y todavía no fue atendida por los funcionarios a cargo del tema para ofrecer alternativas viables para ejecutar la obra.

“Los ferrys se han vuelto a hundir y no se tiene en cuenta que son un patrimonio histórico. Los barcos sí o sí tienen que salir a seco. Necesitamos trasladarlos hasta Miguel Lanús”, dijo Colazo.

“Presentamos un plan de salvataje y solo nos falta la estación de Miguel Lanús para poder hacerlo. Al Gobierno no le costaría ningún dinero”, agregó.

Historia de los barcos

Los ferrobarcos “Ezequiel Ramos Mejía” y “Roque Sáenz Peña” llegaron desde Escocia a Posadas el 18 de octubre de 1913 y su inauguración se realizó con ceremonias en la capital misionera y en Encarnación, con la presencia del vicepresidente paraguayo José Montero, el gobernador de Misiones, coronel Gregorio López y el intendente posadeño Walter Grobli.

Fueron construidos en un astillero de la ciudad de Glasgow y vinieron navegando hasta el Río de la Plata y luego el Paraná por marinos europeos guiados por conocedores locales.

En aquellos años en la Argentina se construyeron los ferrocarriles que unirían a Buenos Aires con Asunción, en Paraguay. Para trasladar los trenes a través del río, el presidente argentino Sáenz Peña y el Ministro de Obras Públicas, Ramos Mejía, encargaron al astillero escocés la construcción de los ferrobarcos que después llevarían sus nombres.

Así llegaron a Misiones estos ferrys que contaban con la tecnología de punta para la época y están hechos con materiales nobles de muy alto valor.

Además actualmente son únicos en el mundo, por ser los últimos ejemplares que funcionan a leña. Funcionaron recorriendo el Paraná hasta 1990, cuando se inauguró el puente Roque González, que une a Posadas con Encarnación.

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Los ferrys, abandonados y olvidados en la costa [/vc_column_text][vc_tweetmeme][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_facebook type=”button_count”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]vb[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]

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