[vc_row][vc_column][vc_column_text]Tras las especulaciones de las últimas semanas, finalmente hoy será exhumado el cadáver del pintor surrealista español Salvador Dalí para tomar muestras de ADN que permitan resolver la demanda presentada por una mujer de 61 años que asegura ser su hija.[/vc_column_text][vc_single_image image=”118246″ img_size=”full” alignment=”center”][vc_column_text]La cripta del pintor se abrirá por primera vez desde su muerte, hace 28 años, luego de que la justicia española rechazó el recurso de la fundación y museo Gala-Salvador Dalí, de la ciudad de Figueres, por el cual pidieron retrasar la exhumación por considerar “prácticamente imposible” cumplir el plazo.

El horario de la actuación también fue motivo de polémica, por lo que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña indicó que los expertos forenses podrán iniciar sus labores a partir de las 20, hora local (las 15 en la Argentina), una vez que cierre el Teatro-Museo Dalí, en la localidad de Figueres, Girona, donde reposan los restos embalsamados del pintor, y no a las 9, como se había fijado inicialmente.

Los trabajos se harán a puerta cerrada y no implicarán el traslado del cuerpo, sino que los médicos forenses se limitarán a tomar una muestra de material biológico en el mismo sitio donde está enterrado.

Los detalles técnicos se conocerán mañana en una conferencia de prensa que prevé dar el museo. En tanto, según informó la prensa, la fundación Dalí obligará a guardar silencio a los operarios y expertos sobre el estado del cuerpo.

El principal problema que plantea la exhumación es que la cripta, situada bajo la cúpula del Teatro-Museo Dalí, está catalogada como Bien Cultural de Interés Nacional y cualquier acción sobre ella requiere un procedimiento especial.

La exhumación, ordenada el 26 de junio por una jueza de Madrid a raíz de una demanda presentada hace dos años por Pilar Abel, una astróloga y tarotista que sostiene desde 2007 que es fruto de una relación secreta mantenida por su madre con el pintor, al que habría conocido cuando ella, que por entonces tenía 25 años, trabajaba como sirvienta en Cadaqués, el idílico pueblo catalán que frecuentaba el artista.

La prueba de ADN -necesaria ante la falta de otros restos biológicos o personales- podría ser clave en el juicio sobre la supuesta paternidad de Dalí, previsto para el 18 de septiembre.[/vc_column_text][vc_facebook type=”button_count”][vc_tweetmeme][vc_column_text]La Nación / vm.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]