PUERTO RICO. En las últimas horas, Paulino Ramón Olmedo (28) y Andrea Elizabet Mieres (34) recuperaron la libertad al vencer los plazos de la prisión preventiva en el marco de la causa por el asesinato de María Yess (63), madre de Mieres, en su vivienda de la calle Río Grande en Puerto Rico.

El crimen ocurrió el domingo 24 de julio de 2016. Y al estar vencidos los plazos de la preventiva, en Febrero de este año, quedó anulado el requerimiento de elevación a juicio oral. Así, el juez Leonardo Manuel Balanda Gómez, decidió excarcelar a la pareja sospechada de “homicidio calificado con arma de fuego agravado, con alevosía y por codicia, con el concurso premeditado de dos personas”.

En diálogo con MisionesCuatro, el abogado querellante, Marcelo Sussini, apuntó a los errores en la actuación de la fiscal de la causa. Y denunció que la querella se enteró de la liberación de Mieres y Olmedo, después de concretada esa medida. La presunta matricida recuperó su libertad la semana pasada. En tanto que su pareja, fue liberado este miércoles.

“No sólo las pruebas de parafina (sobre los acusados) sino otras pruebas y el estado en la que se encontraba la causa, con los elementos suficientes para la elevación a juicio, nos encontramos con la sorpresa de una excarcelación extraordinaria, por cierta negligencia de parte de la fiscal. Lo que pareciera un expediente con pruebas contundentes, como para fijarse fecha de juicio, ahora nos encontramos con la sorpresa de que ambos imputados han sido excarcelados por el tiempo transcurrido sin llegar a una condena”, se quejó Sussini, en tono crítico hacia la fiscal de la causa.

Consultado por los motivos del crimen, Sussini reveló que “había mala relación y cuestiones de dinero. La imputada estaba buscando solicitar sumas de dinero, no sabemos para qué fin. Había cuestiones vinculadas a lo monetario. El mero hecho de la vinculación con su pareja, ligado a cuestiones irregulares en esa zona. La avaricia pudo ser uno de los fines”, comentó Sussini

“Los elementos de prueba son contundentes, no son dos pruebas aisladas. Hubo una suma de elementos probatorios que llevaron a la imputación objetiva del hecho. La excarcelación no hace a las cuestiones de los elementos probatorios de la causa. Sino que se deben al transcurso del tiempo y a la falla de la fiscal en el requerimiento de elevación a juicio”, manifestó el abogado.

Por otra parte, Sussini, sobrino de la víctima, denunció la “falta de notificaciones del juzgado interviniente, para ponernos en aviso, ante la posibilidad de liberación. Nos enteramos días después de la liberación. Más allá de alguna pseudo medida de protección. No sabemos de qué pueden ser capaces (los imputados) en este momento en que están en libertad. Hay restricciones a su libertad. Pero ahora estamos trabajando en proteger al núcleo familiar”, sostuvo el letrado.

Consultado, el abogado explicó que, ante la nulidad de la elevación a juicio, “al volver la causa al juzgado de instrucción, que debe tomar una nueva indagatoria y pedir una nueva elevación a juicio, sabiendo los tiempos de nuestra justicia provincial, el proceso va a demorar. Van a pasar mucho más que meses para llegar a otro auto de elevación a juicio. Todos los actos procesales deben realizarse de nuevo”, manifestó Sussini.

Asimismo, Sussini reveló que “desde antes del hecho, ya había una situación conflictiva (entre la víctima y la presunta asesina) y al perder a su abuela, que era su referente afectivo, estamos buscando todas las medidas para poder garantizar sus derechos. Para su protección. Esta noticia les cayó como un balde de agua fría. Estamos trabajando para contenerlas”, precisó el abogado. Quien agregó que todas las gestiones para contener a las niñas, fueron en el ámbito privado. Es decir, que el Estado no hizo nada para contener a las hijas de la acusada.