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Inician cadena de oración por el cabo gravemente herido en un “bautismo” del Ejército y su madre clama por justicia

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Michel Nathanael Verón (27) sufrió lesiones gravísimas en la columna vertebral que lo dejarían paralítico, si logra sobrevivir a una intervención quirúrgica. Lo habrían arrojado a una pileta en el club Achalay, en una “iniciación” del Ejército, luego de egresar como suboficial en el Regimiento Monte 30 de Apóstoles.

Inician cadena de oración por el cabo gravemente herido en un “bautismo” del Ejército y su madre clama por justicia

APÓSTOLES. Mientras el cabo Michel Nathanael Verón (27) lucha por su vida en el Sanatorio Boratti, luego de haber sufrido gravísimas lesiones en la columna vertebral, que le dejarían paralítico, su madre, María Mónica Rosalino dialogó con el periodista de MisionesCuatro, Gastón Daza, contó detalles del hecho y exigió justicia y que “caigan” todos los responsables de lo sucedido. La mujer habría radicado la denuncia ante la Policía Federal de Posadas.

Según pudo saber este medio, Michel Verón participaba de un “bautismo” para suboficiales en el Club de Suboficiales del Ejército (“Achalay”) ubicado en calle Teniente Espinoza, detrás del Barrio Militar de Apóstoles. En ese marco, lo habrían obligado a tomar una botella de vino puro con chimichurri y lo arrojaron a una pileta, donde habría sufrido la lesión incapacitante, que lo dejó al borde de la muerte. Con su vida en riesgo, familiares y amigos del joven cabo -papá de un niño-, iniciaron una cadena de oración.

Y su mamá, Mónica Rosalino, lanzó fuertes acusaciones contra los responsables del “bautismo” o “rito de iniciación” para suboficiales del ejército.

“Me dirijo a quien me esté escuchando para pedir justicia por lo que le hicieron a mi hijo. La injusticia que le hicieron a Michel, tan joven, no se merece esto. Tengo mucha fe en que va a salir de esto. Pero quiero justicia por mi hijo. Y para que a ningún chico más le pase esto, el ‘bautismo’ a los chicos que egresan (del Ejército), que sufren en la escuela, que hacen lo posible para esmerarse y llegan acá y les dan otra ‘bienvenida’”, expresó Rosalino, sobre el supuesto bautismo para suboficiales donde su hijo sufrió heridas gravísimas.

Según Rosalino, el viernes por la tarde se dio este bautismo, “que organizan los superiores a ellos, el jefe de su compañía. Hay 25 personas involucradas. A las 5 o 6 de a tarde ocurrió esto. Estaba su jefe de compañía con 25 más. No sé qué cargo tienen, pero le humillaron, le hicieron bailar. Le hicieron tomar bebidas de todas clases. Mezclar bebidas alcohólicas. Cinco chicos eran los que egresaron”, contó la mamá del cabo de 27 años, que lucha por su vida.

“Estaba tan feliz con su egreso y a la vez tenía miedo. El jueves me reuní con él en su casa a la noche. Se recibió el viernes (1 de Julio) y el sábado (2 de Julio) hicimos una cena en mi casa con mis hijos, sanamente. Eso es una bienvenida como ellos hacen. ¿Qué significa eso? Pido justicia. Esto nunca puede ser más. (Michel) tiene un nene de 5 años”, contó Rosalino, condenando la “terrible maldad” que hicieron los responsables del bautismo de los suboficiales del Regimiento Monte 30 de Apóstoles.

De acuerdo con la mujer, Michel Nathanael fue el que hizo el asado, “porque es un excelente asador, padre, amigo, compañero. Mi primer hijo, no se merece esto. Como los tipos querían asado a la estaca, querían todo, hicieron una lista de no sé cuántas bebidas querían tomar. Le hicieron tomar y no probó el asado, porque ellos (los suboficiales) no prueban el asado. Son los superiores los que tienen que probar. (Ahora) está peleando por su vida. Y para completar, la frutilla de la torta, le hicieron tomar (a Michel) vino puro, fondo blanco, mezclado con chimichurri, limón, alcohol y de todo. No sé qué tienen en la cabeza. ¿Cómo pueden tener un cargo en el ejército? No tienen corazón”, fustigó Mónica, exigiendo justicia por lo que le hicieron a su hijo.

“La familia y Apóstoles le está orando, le llora y le da fuerzas. Michel yo te espero en casa, vamos a ir a pescar juntos como siempre”, dijo quebrada, la mujer.

“No puede ser que pasen estas cosas. Uno le cría a los hijos pero no para esto, para verlos enfermos en una silla de ruedas. Tengo mucha fe, soy una cristiana que siempre la peleó para que mis hijos sean alguien en la vida. No tuve mucho estudios pero luche por que sean chicos educados y esmerados. Quiero justicia por Michel, quiero que paguen todos, hasta las últimas consecuencias”, manifestó la mujer, apuntando a las responsabilidades del “accidente” durante el “bautismo” a suboficiales del Ejército.

Fuentes inobjetables relataron a este medio que en la llamada “cena de camaradería” los cabos recién recibidos tenían que servir a sus superiores para ganarse el derecho de piso. Al cabo le empujaron a la pileta luego de hacerle tomar vino con chimichurri en 10 segundos y desde ahí no se pudo levantar más.

Otra fuente sostuvo que una vez ocurrido el “accidente” los superiores habrían querido ocultar el hecho. Lo llevaron al cuartel junto con los demás, lo alzaron en una camioneta y le llevaron al cuartel para ver si se “estabilizaba”. Muchas horas después, según las fuentes, dieron aviso a Salud Pública. Michel habría llegado con hipotermia, sin reflejos y sin movilidad.

Por otra parte, el parte médico sostiene que el cabo Verón “no va a volver a caminar ni tener movilidad en su cuerpo”, señalaron fuentes consultadas.

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