POSADAS. “Lo que hace el titular de la Oficina Anticorrupción (OA), es una decisión política”, insistió la ex titular del organismo, Laura Alonso, en diálogo con MisionesCuatro este miércoles, tras confirmarse que la oficina deja las querellas en causas contra funcionarios y ex funcionarios. La dirigente del PRO reiteró sus cuestionamientos a la orientación que está dando el gobierno de Alberto Fernández, al problema de la corrupción en el Estado. “La OA y la UIF (Unidad de Información Financiera) ya no existen”, bramó.

“Nos llamó la atención y nos preocupó esta decisión del titular de la OA (Félix Crous) de destruir de facto, una de las actividades más importantes, que tienen que ver con la participación como querellante en juicios estratégicos por corrupción. En 20 años, este organismo del Estado participó en juicios contra ex presidentes. Y contra un ex vicepresidente (Amado Boudou), que fue condenado. La Oficina Anticorrupción participó en juicios contra Fernando De La Rúa. Contra Carlos Menem por el pago de sobresueldos con fondos de la Side. Y contra Cristina Kirchner en este momento”, puntualizó Alonso, en diálogo con MisionesCuatro.

Una decisión política de Crous y Alberto

Según la dirigente macrista, lo que hace Crous, retirando a la OA de su rol de querellante, no tiene que ver con la falta de presupuesto o de personal, como esgrimió el ex fiscal de Justicia Legítima. “Es una decisión política. Desde diciembre del 2019, la Oficina Anticorrupción depende de la presidencia de la Nación. Es el propio presidente (Alberto Fernández), si falta personal, el que debería dar autorización para que la OA pueda contratar recursos humanos”, explicó la ex funcionaria.

En cuanto a la situación en la que se encuentran los arrepentidos en causas por corrupción en el Estado, Alonso no dudó en señalar que pueden estar en peligro, por la retirada de la OA. “Más allá de que las causas siguen su curso, la OA siempre tuvo una actitud proactiva para colaborar con los arrepentidos. Fue una ley aprobada durante la presidencia de Mauricio Macri. Los arrepentidos en causas de corrupción, narcotráfico o crimen organizado, son fundamentales para descubrir los entramados criminales de estas organizaciones delictivas tan complejas. La Oficina siempre estuvo a favor de acompañar, apoyar y proteger a los arrepentidos y los testigos protegidos”, agregó la dirigente.

El riesgo que podrían correr los arrepentidos

Alonso se preguntó por lo que sucederá con arrepentidos tales como Leonardo Fariña, Larua Muñoz (ex esposa de Alejandro Vandenbroele), “el propio Víctor Centeno (pieza clave en la causa Cuadernos) o Víctor Manzanares, el contador de los Kirchner quien contó cómo y con quiénes se dibujaban los números de las declaraciones patrimoniales y cómo se movía el dinero a través del secretario Muñoz”, bramó.

“Estamos aquí ante una abdicación de la OA y una decisión política que sigue pavimentando la avenida de la impunidad para la vicepresidenta (Cristina Kirchner), su familia y ex funcionarios kirchnerista”, sentenció.

Consultada al respecto, Alonso aseguró que las penas de prisión pedidas por la OA bajo la gestión del kirchnerista Crous contra Lázaro Báez, son mucho menores a las calculadas durante su gestión. “Tenemos que pedir a jueces y fiscales que sean responsables. Que avancen en las investigaciones. Ya que ya no existen la OA y la UIF, ya no existen”, fustigó la dirigente, insistiendo en que los abogados del organismo, “son muy serios” y jamás cederían ante presiones políticas de la cúpula del organismo.

En cuanto a la gestión de Crous, que forma parte del grupo kirchnerista Justicia Legítima, Alonso reveló que este nunca quiso ponerse en contacto “para conversar o intercambiar información. Tenemos a alguien que de corrupción no sabía nada. Que nunca antes había aparecido en ningún foro o ámbito, nunca se le conoció un artículo sobre corrupción. Será fiscal pero no tiene ninguna experiencia comprobable”, puntualizó.

El problema de las justicias provinciales y la corrupción

Sobre el final de la entrevista, Alonso dijo no recordar si la OA estaba investigando a funcionarios misioneros, aunque seguramente así era. Sin embargo, la ex funcionaria advirtió sobre el estado presente de la justicia federal en las provincias y de las justicias provinciales. “La democracia republicana debe funcionar en todas las provincias. Tenemos que posar la lupa en mejorar, con propuestas y normas, la calidad institucional de los gobiernos provinciales. Donde las justicias afectan la vida económica y de las provincias, si toman malas decisiones”, subrayó Alonso.

Para Alonso, es “desconcertante” que la OA bajo la gestión de Crous, deje de ser querellante en causas como las derivadas de la Tragedia de Once. Pero “esto tiene que ver con la decisión del presidente Alberto Fernández, de facilitar el camino judicial de Çristina Kirchner”, concluyó.