El primer ministro de la India, Narendra Modi, se mostró este sábado seguro de hacerse con un tercer mandato consecutivo tras finalizar las elecciones generales, cuyos resultados se esperan el próximo martes aunque la mayoría de encuestas a pie de urna apuntan a una victoria del líder nacionalista hindú.
“Puedo decir con confianza que el pueblo de la India votó en un número récord para reelegir al Gobierno de la Alianza Democrática Nacional (NDA)”, la coalición liderada por el Bharatiya Janata Party (BJP) del primer ministro, escribió en la red social ‘X’.
A falta de resultados oficiales hasta que la Comisión Electoral inicie el laborioso recuento el próximo martes, seis sondeos a pie de urna indican que la coalición de Modi superará con holgura la barrera de 272 escaños en la Cámara Baja del Parlamento necesarios para formar gobierno.
Estas encuestas, que no conceden al BJP la arrolladora mayoría que se había marcado como objetivo, son vistas con escepticismo en el país asiático al haberse equivocado con frecuencia en el pasado y no sirvieron para desalentar a la coalición de partidos opositores liderada por el histórico Partido del Congreso (INC).
“La coalición INDIA logrará más de 295 escaños”, declaró el presidente del INC en una rueda de prensa en la que estuvo rodeado de otros líderes opositores, durante la que calificó las encuestas a pie de urna de propaganda gubernamental.
Las mastodónticas elecciones generales en la India decidirán los 543 escaños de la Cámara Baja del Parlamento o Lok Sabha en liza y arrancaron el pasado 19 de abril.
El contexto de las elecciones en la India
Los comicios estuvieron marcados por semanas de agrios debates y mítines multitudinarios, así como por las altas temperaturas con máximas que rozaron los 50 grados y que causaron la muerte de al menos 62 personas por golpes de calor en los últimos días, incluyendo decenas de funcionarios electorales.
Modi buscó una reelección en base a su desempeño económico, con la India pasando a ocupar el quinto puesto mundial con respecto a su tamaño durante su mandato, pero también recurrió como nunca a un discurso dirigido contra la minoría musulmana, que representa en torno al 14% de los más de 1.400 millones de habitantes.
El líder nacionalista hindú fue acusado de discriminación contra las minorías religiosas durante su década en el poder y de acallar las voces críticas y la libertad de prensa.
Por su parte, Modi calificó a la coalición opositora de fragmentada y corrupta, formada con el único objetivo de desalojarle del poder pero sin un líder claro para ocupar el puesto de primer ministro.
